Temperatura
Al igual que los adultos, los bebés tendrán dificultades para dormir si la temperatura es demasiado alta o demasiado baja, especialmente porque no pueden regular su temperatura corporal como lo hacen los adultos. Sugerimos que la habitación del bebé debe estar a unos 16-20 ° C para una noche de sueño mucho más cómoda. Un saco de dormir Slumbersac es una excelente manera de ayudar a mantener la temperatura corporal de tu bebé durante toda la noche sin el uso de mantas adicionales, y también es mucho más seguro.
Ruido
Cuando tu bebé estaba en el útero, estaba rodeados de ruidos. El sonido de su respiración, su corazón latiendo y su sangre fluyendo alrededor de su cuerpo hace que tu bebé no se haya acostumbrado al silencio. Los dispositivos/aplicaciones de ruido blanco pueden proporcionar un sonido suave y constante que ayuda a calmar al bebé, alentándolo a que se relaje en un sueño más profundo rápidamente. Es importante mantener el ruido blanco frente a la cuna de su bebé y no al lado, al mismo tiempo asegurandote de que no sea demasiado ruidoso.
Iluminación
Nuestro reloj biológico a menudo se regula a través de la iluminación. Cuando está oscuro sabemos que es hora de dormir, y cuando hay luz sabemos que es hora de estar despiertos. Una habitación oscura es ideal para tu bebé por la noche, ya que le ayuda a reconocer esta diferencia entre el día y la noche. Esto también puede ser útil cuando intentas crear una rutina para acostarte. Las persianas o cortinas opacas son una excelente manera de mantener la luz apagada, creando un ambiente mucho más relajante y con menos distracción.
Seguridad
Un ambiente perfecto para dormir es uno que también es seguro. Una excelente manera de asegurarte de que tu bebé duerma de manera segura es mirar el ABC del sueño seguro. Tu bebé debe dormir solo, boca arriba y en una cuna. Dentro de la cuna no debe haber protectoresde bebé, ropa de cama suelta o ni siquiera su peluche favorito, ya que pueden presentar un riesgo de asfixia accidental. También se debe usar un colchón firme con una sábana ajustada para un ambiente de sueño más seguro. Si haces todas estas cosas, puedes dormir un poco mejor sabiendo que tu hijo está teniendo una noche de sueño seguro.
Esperamos que estos consejos y sugerencias ayuden a tu bebé y a ti a tener una noche de sueño mejor y más relajante. ¡No dudes en compartir cualquier consejo adicional o tus experiencias personales, ya que nos encanta conocerlos!
